Nosotros
En Jacqueline Dental Lab contamos con un equipo de profesionales apasionados por la ortopedia y la ortodoncia, que combina experiencia, dedicación y creatividad en cada detalle. Nuestro compromiso es trabajar de la mano con odontólogos y pacientes para ofrecer soluciones personalizadas, confiables y de la más alta calidad.
Miembros
Creemos que la excelencia se logra trabajando en equipo. Cada miembro de nuestro laboratorio aporta experiencia, dedicación y pasión para garantizar que cada aparato sea preciso, funcional y de la más alta calidad.
Fabricados con métodos actualizados que garantizan eficacia y mejores resultados clínicos.
Ofrecemos una amplia variedad de colores y estilos para adaptarse al gusto de cada paciente.
Cada detalle se realiza con exactitud para asegurar un ajuste perfecto y cómodo.
Cumplen con precisión su objetivo: mantener, corregir o guiar la posición dental de manera efectiva.
El proceso inicia cuando recibimos el modelo de yeso o impresión enviada por el odontólogo. Este paso es fundamental, pues sobre esta réplica exacta de la boca del paciente trabajaremos para diseñar un retenedor que se adapte perfectamente.
La Dra. Jacqueline Rueda analiza el caso clínico y planifica el diseño del retenedor. Se estudia qué tipo de aparato es el más adecuado, evaluando la posición dental y el objetivo del tratamiento.
El odontólogo, junto con el paciente, puede escoger entre una amplia variedad de colores y estilos. Incluso se pueden integrar diseños especiales (caricaturas, logos, banderas, efectos multicolor) para que cada retenedor sea único y refleje la personalidad del paciente.
Se determina cómo debe disponerse el alambre para asegurar que cumpla su función de retención o guía, dependiendo del tratamiento.
Bajo la precisión de la Dra. Jacqueline Rueda, se dobla y adapta el alambre directamente sobre el modelo dental. Es clave que quede firme y perfectamente ajustado para un rendimiento óptimo.
Se aplica el acrílico en el color o diseño elegido, cubriendo y fijando el alambrado. Aquí se combinan técnica y creatividad para asegurar resistencia, comodidad y estética.
El aparato se somete a un proceso de curado que fortalece el material, garantizando durabilidad y seguridad en el uso diario.
Se eliminan rebordes o irregularidades y se le da un acabado brillante, suave y estético. Esto asegura comodidad para el paciente y realza la calidad final.
El retenedor es cuidadosamente limpiado y verificado bajo altos estándares, asegurando que cumpla con la planificación inicial y esté listo para su uso.
El retenedor se guarda en una caja plástica especial y se protege con bolsas de esterilización clínica, garantizando higiene y seguridad hasta la entrega.
Finalmente, se embala y se despacha mediante transportadoras seguras como Coordinadora o Servientrega. El odontólogo recibe la guía de envío para seguimiento del pedido.
Contáctanos
Cada retenedor viaja protegido en su caja plástica especial y perfectamente limpio, listo para llegar a tu consultorio en cualquier ciudad de Colombia.
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